viernes, 1 de octubre de 2010

Por que reciclar?

El reciclaje es importante porque se reduce el impacto ambiental de los desechos que generamos; cuando se recicla se hace una separación selectiva de los residuos que hace que sea más fácil utilizarlos como materia prima para la elaboración de otros productos y llevar al relleno sanitario solo los residuos biodegradables.

Al reciclar se reduce el impacto negativo sobre el suelo si la disposición final se hace en rellenos sanitarios y sobre el aire si son sometidos a incineración.

Mercados del Reciclaje

El reciclaje como parte de la estructura del manejo integral de residuos sólidos permite que los residuos sean valorizables, es decir, que tengan valor económico. Diversos estudios han comprobado que el reciclaje brinda un sinnúmero de ventajas sociales, económicas y ambientales. Entre éstas sobresale el ahorro de energía, la menor descompresión de los recursos vírgenes, el incremento de los productos tangibles y; la generación de empleos, entre otros.

En lo que respecta al ahorro energético, en el caso del reciclaje de aluminio, se ha comprobado que este proceso reduce en un 95% el consumo de energía respecto a la elaboración a partir de materiales vírgenes, en los plásticos el 70%, para el acero 60%, para papel y vidrio 40% y 30%, respectivamente. Sin embargo en algunos casos el reciclaje conlleva a costos elevados en términos de recolección, transporte y tratamiento.

celulares reciclados

El teléfono celular es una tecnología en constante evolución con vida útil de tres años en promedio, pero el usuario tiende a cambiarlo una vez por año. Se ha preguntado ¿adónde va a parar su celular viejo? ¿El daño que estos desechos tecnológicos le hacen a la Tierra?

El precio de una pasión
Paulino López es un joven empresario que se ha vuelto adicto a la tecnología por “razones de trabajo”. La palabra que lo describe mejor es ‘tecnólico’.

Reconocer a un tecnólico es fácil: llevan consigo dos o tres teléfonos celulares de última generación, su Palm Pilot, poseen una computadora portátil—de última generación, por supuesto—, y dos más de escritorio, una en la casa y otra en la oficina. Compra cualquier aparato nuevo que aparezca y desechan el anterior.